Terminando de leer este libro, quiero dejarlos con este extracto que público textualmente del Cap 14 :
“Lograr que el hecho de pasar caminando al frente parezca ser la parte difícil y necesaria para la salvación, solamente contribuye a aumentar la confusión de la gente en torno al evangelio. Es una mezcla de fe y obras que da la impresión de que estar dispuesto a pasar al frente se relaciona de alguna manera con estar dispuestos a venir a Cristo, una frase que puede significar cosas diferentes para muchas personas.
Me retorcí por dentro cuando escuché decir a una persona que asiste a una iglesia donde hacen tales invitaciones: “Yo quiero ser salvo, pero será para el próximo domingo…” Este popular y errado concepto de las invitaciones, no solo añade al evangelio un requisito de obras, sino que también pone la seguridad sobre un fundamento equivocado. Muchas personas creen actualmente que se salvan porque han pasado al frente para a recibir a Cristo.”
El doctor Lewis Sperry Chafer, fundador del Seminario Teológico de Dallas, frecuentemente hacía invitaciones públicas en los primeros años de su ministerio. Pero eventualmente llegó a la conclusión de que estás ensombrecían los asuntos del evangelio. El dijo: “Los que estudian con cuidado el evangelio se han dado cuenta de que allí donde más se han hecho énfasis en la necesidad de una acción pública como parte de la conversión, se ha dado un correspondiente incremento en el registro de “los que retroceden o caen de la gracia” como se dice, la cual naturalmente no honra a Dios.
La razón es obvia. Las personas que no se han convertido creen que se salvan simplemente porque pasan adelante, se sienten mejor después de haber hecho algo.
Erwin Lutzer